Las sondas lambda dispuestas detrás del catalizador sirven para controlar el rendimiento de catalizador y el funcionamiento de las sondas lambda situadas delante del catalizador.
Las sondas lambda son caldeadas debido a que para su operatividad se precisa una temperatura de aprox. 300 grados Celsius. Este calefaccionado es controlado por el dispositivo de mando del motor.